Porcelana de Arita
PORCELANA DE ARITA
La Porcelana de Arita, máximo exponente de la porcelana japonesa, tuvo su origen hace cuatrocientos años en la zona oeste de la isla de Kyushu, al Sur de Japón.
Se trata de piezas blancas, semitransparentes ante un foco de luz, y decoradas en su mayoría con trazos en azul cobalto, si bien pueden incluir también otros colores, o incluso detalles en oro.
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¿Cuál es la diferencia con la porcelana de Imari, o Imari Yaki?
Durante cientos de años, la porcelana de Arita se conoció como porcelana de Imari, o Imari Yaki, pues el puerto de la cercana ciudad de Imari era el punto de salida de la producción de Arita hacia todo Japón.
Incluso cuando la Compañía Holandesa del Este de India comenzó a importarla a toda Europa desde el cercano puerto de Nagasaki, tomó el nombre de “Old Imari” entre la realeza y familias nobles europeas.
¿Cuál fue el origen de la porcelana de Arita?
Las incursiones de Japón en Corea de finales del siglo XVI, tuvieron como consecuencia la llegada al país de numerosos artesanos, acompañando a los señores feudales que volvían de las campañas militares.
Uno de estos artesanos fue Ri Sampei, que descubrió en las afueras de la ciudad de Arita una cantera de piedra de porcelana, lo que junto a su conocimiento de las técnicas de producción hizo posible la aparición del primer horno, bajo la protección del clan feudal de la época, la familia Nabeshima.
La protección de los secretos de la producción de las piezas por el clan Nabeshima fue clave en el desarrollo y florecimiento de la ciudad, que articuló su actividad en torno a los hornos que surgieron.
¿Por qué comprar Porcelana de Arita?
Cada pieza de nuestro catálogo es el resultado de 400 años puestos al servicio de la creación de una de las porcelanas más apreciadas a nivel mundial. La composición de la “piedra de porcelana” descubierta en la cantera de Izumiyama por Ri Sampei, incluye cuarzo, feldespato y caolín en la proporción perfecta para obtener una porcelana bellísima, con unas características excepcionales de delicadeza y resistencia.